Villavicencio es reconocida con premio Nacional de alta gerencia por los fogones comunitarios durante la pandemia
Por su gestión en seguridad y soberanía alimentaria durante la pandemia del covid-19, Villavicencio fue reconocida por el Gobierno nacional, con el Premio Nacional de Alta Gerencia en la categoría ‘La administración pública no se detiene ante la crisis’.
La estrategia que representó a la capital del Meta fue los Fogones Comunitarios, un proyecto colectivo que surgió de las comunidades y que luego apoyó y fortaleció el gobierno ‘Villavicencio Cambia Contigo’, durante más de seis meses, en 31 puntos, logrando alimentar más de 5.400 personas y más de 1.600 núcleos familiares.
Jeison Baquero Parrado, integrante del fogón comunitario Brisas del Guatiquía, explicó el proceso adelantado de manera colectiva. Quienes no sabían preparar los alimentos, entraron a la cocina para unir esfuerzos con los que tenían conocimiento por las personas más vulnerables y hoy reciben con orgullo este reconocimiento.
“En nuestro fogón nunca habíamos hecho trabajo en equipo, pero debido a la situación aprendimos a hacer de todo y nos organizamos por equipos, los de logística, aseadores, peladores o picadores y cocineros”, contó Jeison.
A través de sus redes sociales, el alcalde de Villavicencio, Felipe Harman, agradeció el compromiso de las comunidades de cada fogón manifestando que “¡Este logro es de ustedes!”.
“Este premio es un logro significativo para las comunidades de los fogones comunitarios que sacaron tiempo para que muchos tuvieran la oportunidad de llevar comida caliente a la mesa aún en tiempos de pandemia”, dijo el secretario de Gestión Social y Participación Ciudadana, Diego Díaz Jaramillo.
Se trata de un reconocimiento al tejido comunitario, al arraigo territorial y a los nuevos liderazgos de la otra Villavicencio posible, agregó.
El galardón del Gobierno nacional se otorga hace 20 años a las experiencias de gestión pública más exitosas del país y este año se presentaron 501 iniciativas.
Heinz Gamba Vargas, asesora de la Secretaría de Planeación, explicó que este proceso es la muestra viva de que “una comunidad empoderada es capaz, puede y tiene toda la fuerza para salir adelante con procesos mancomunados, autogestionados y de la mano de una actual administración que valora el trabajo colectivo”.
